lunes, 6 de octubre de 2008

Se me olvidó...





Se me olvidó que venía el invierno,
y no tenía abrigo que ponerme...



Se me olvidó que se me había roto la brújula,
y vuelvo a estar perdida en el camino...



Se me olvidó comprar pilas para la linterna,
sin brújula ni linterna en medio de la nada...


Se me olvidó asistir a las clases de girlscout,
así pues no se encontrar mi norte en la oscuridad...



Se me olvidó que estaba triste,
así que me volví a maquillar la sonrisa...



Se me olvidó que te odiaba,
y me volviste a doler...



Se me olvidó olvidarte al recordar que aún te quería...
te volveré a odiar.



1 comentario:

Alfonso dijo...

Puff, hacía mucho que no me pasaba por aquí.

El otoño no es bueno para los sentimientos, porque invita a quedarse en casa, flagelarse y autocompadecerse.

Pero en otoño tambien hay días de sol y tardes de paseo.